Datos personales

Cali, Valle, Colombia
Este Colectivo no hace diferencias de ninguna índole, inclusivo cien por ciento, respetuoso de las creencias y ritos, abierto a todas las formas de pensamiento, deseoso de hacer de Univalle un espacio académico, investigativo, cultural, recreativo, de discusión, de compromiso ciudadano donde quepamos todos y todas.  Consientes de que el trabajo del Colectivo debe ir más allá de  reivindicaciones  coyunturales, hoy nos planteamos el trabajar en tres ámbitos: 1. Gestionar ante la Dirección Universitaria las condiciones de accesibilidad (salones, subsidios, movilidad) de los compañeros y compañeras con discapacidad en el campus universitario. 2. Abrir un espacio de discusión académica en la vía de construir pensamiento crítico alrededor de esta cuestión, esto es, debatir o poner en cuestión los diferentes modos de pensamiento que han circundado la construcción del Otro deficiente . 3. Colocar en la agenda universitaria la necesidad de una Política Institucional en discapacidad.

martes, 24 de noviembre de 2009

INVITACION

3 de diciembre, día mundial de la discapacidad


Los seres humanos tenemos un ciclo de vida que inicia y finaliza con la dependencia. Al nacer, y en los primeros años de vida, como al envejecer, necesitamos del acompañamiento de personas para la realización de tareas que en otro momento hacemos de forma autónoma. Sin embargo, esta no ha sido la regla para muchas personas que, desde el nacimiento o en el transcurso de la vida, a consecuencia de un accidente o enfermedad, le imposibilitan el desempeño de las tareas cotidianas, viéndose obligadas a realizar sus labores de manera diferente a las demás personas. Esto no sería un problema si el entorno, el medio fuera de acceso universal, es decir, no presentara las barreras físicas, de movilidad, comunicativas, jurídicas, de actitud, que impiden el funcionamiento autónomo de las personas con deficiencias. Así, las personas con deficiencias terminamos siendo Discapacitadas por la sociedad y sus instituciones. Las diferencias de funcionamiento de las personas con deficiencias físicas o mentales, al ser valoradas negativamente (no se adapta al medio “normal”) por los ciudadanos en una sociedad de desiguales (ricos y pobres), se convierten en un estigma, en una marca de “invalidez” social que nos excluye de la cadena productiva, es decir como personas útiles de y para la sociedad, quedando relegados a los servicios asistenciales del estado, las ONG y el sector privado.
Las deficiencias en las personas son producto de múltiples circunstancias. En un sistema de acumulación de capital, se evidencia principalmente en los avances científicos y tecnológicos de las ciencias de la salud que logra prolongar la vida más allá de los límites “naturales” toda vez que los descubrimientos de nuevos fármacos, cirugías etc, se ponen al servicios de la población pero su accesos, dado los altos costos de los mismos, es excluyente. Esa sobre-vida (longevidad) que logra la ciencia, dadas las condiciones de desigualdad económico-social, es de poca calidad, dando como resultado una alta proporción de personas mayores con deficiencias, que ingresan al circuito multimillonario del mercado de la salud y los seguros.

Como vemos, estas sociedades capitalistas altamente industrializadas, son productoras de altísimos niveles de discapacidad. Completa el cuadro las tecnologías contaminantes de la industria y sus desechos tóxicos, la manipulación genética y las nuevas especies producidas en laboratorios y la violencia como enfermedad: la fabricación y uso de armas en las guerras y delincuencia común, sin embargo los gobiernos no hacen nada por contrarrestarlo, por el contrario lo alientan, lo mantienen. La fabricación y circulación de automóviles y su correspondiente accidentalidad, la contaminación del aire que respiramos; pero sobre todo, la violencia que se expresa en la negación del derecho legítimo a un salario, a conseguir el sustento, así sea vendiendo lo único que tenemos los proletarios del mundo, nuestra fuerza de trabajo. La insuficiente alimentación y la ausencia o deficiencia en los servicios básicos de higiene son la causa principal de discapacidad menta en el mundo. Existe una relación directa entre pobreza y discapacidad: a mayor pobreza corresponde mayor discapacidad y viceversa. El 80% de las personas con deficiencias vivimos en países pobres; según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la situación es más grave en la zona rural que en el campo. No podríamos admitir que un sistema de producción social que discapacita en la misma proporción (incluso puede ser más, las consecuencias de largo plazo de la sobre explotación de la humanidad y la tierra aún no las conocemos) que produce, se desentienda de los desastres de su actuar. Podemos concluir que, la discapacidad un entramado que esconde una realidad aún no visibilizada por el ciudadano corriente, pero pérfidamente mantenida por el sistema capitalista deshumanizado y deshumanizante.

Para reclamar del gobierno municipal de Santiago de Cali Políticas Públicas para atender este problema de ciudad le estamos invitando a toda la ciudadanía ceña, particularmente usted compañer@ discapcitad@, a sus familiares y amigos el jueves 3 de diciembre a las 3:00 p.m. una concentración en el Centro Administrativo Municipal CAM

Convoca: Colectivo de Discapacidad de Univalle,

e-mail coletivodisk@gmail.com

Blog: http://colectivodiscapacidadunivalle.blogspot.com/

martes, 27 de octubre de 2009

Por qué estudiar la discapacidad a partir de responder primero la pregunta ¿Que es el poder?

“Mi vida sería así, me fui dando perfecta cuenta de eso. Sin embargo, me inquietaba saber si, sí o no, haríamos la visita al Señor Heccehomo en Raspadura. Yo pensaba que, al fin y al cabo, no faltaba sino eso para que yo pudiera caminar. La mayor parte del tiempo, es cierto, olvidaba mi situación porque en realidad me iba acostumbrando a que mi vida sería esa. A veces se me hacían los días largos, la noche corta; cuando no, las noches larguísimas y los días interminables. Mi papá y mi mamá, a menudo, hablaban y hablaban de Raspadura. ¿De que dependía tanta demora?
“Buscando mi madredediós”
Arnoldo Palacios


Por qué estudiar la discapacidad a partir de responder primero la pregunta ¿Que es el poder?

Los estudios sobre la discapacidad que la identifican como fenómeno social presentan diferentes derivaciones: enfoque de derechos humanos, enfoque marxista, etc. todos reconocen, que en las relaciones entre los seres humanos, de una manera u otra, existe una asimetría que se convierte en dependencia física, afectiva, etc. entre las personas (sin) no discapacidad y las PCD. Así, la relación entre médico/paciente resulta de dependencia. La dependencia resulta de la asimetría de poder (capacidad de manejo) que tienen cada uno sobre la situación. se impone el saber médico (“yo se lo que te pasa, vos no sabes”). El saber se impone sobre la ignorancia, toda vez que hemos aceptado que, el saber es producto de la ciencia racional, la ciencia es la constructora única de verdad, o al menos, su verdad prevalece sobre todas las demás (la religiosa, el chamanismo, por ejemplo). La verdad que ella crea se hace incuestionable en un marco de saber que no sea el suyo. La medicina solo admite cuestionamiento a sus verdades, dentro del marco de la medicina, las del derecho, en el marco del derecho y así todas. Esto amerita un capitulo aparte que desarrollaremos en otra oportunidad.
Así como sucede en el caso particular de la medicina, igualmente sucede en todos los ámbitos de la vida de los seres humanos, empezando por las relaciones familiares. De allí la importancia de estudiar el poder referido a la discapacidad como problema social.
El poder no es algo tangible, ni ocupa un lugar determinado, por lo tanto no lo tiene nadie. M. Foucault dice que el poder simplemente se ejerce. El poder se “produce” en el desenlace de la lucha de las fuerzas en contradicción en un campo de batalla. Ese campo de batalla es la política. Ganar en política es ganar poder.
Haciendo un esbozo del análisis histórico de gobernar, M. Foucault plantea tres postulados que resume de la siguiente manera:
1.“El poder no es una sustancia…El poder no es más que un tipo particular de relaciones entre individuos…El rasgo distintivo del poder consiste en que determinados hombres pueden decidir más o menos sobre la conducta de otros hombres, pero nunca de manera exhaustiva o coercitiva. Un hombre encadenado y apaleado está sometido a la fuerza que se ejerce sobre él, no al poder. Pero si se le puede hacer hablar, cuando su último recurso habría podido ser callarse prefiriendo la muerte, es porque se le ha obligado a comportarse de una manera determinada; su libertad ha sido sometida al poder; y él ha sido sometido al gobierno…No existe poder sin resistencia o rebelión en potencia”.
2.“En lo que se refiere a las relaciones entre los hombres, numerosos factores determinan el poder. Y sin embargo, su racionalización no cesa de desarrollarse y adopta formas específicas…El gobierno de los hombres por los hombres…supone una cierta forma de racionalidad y no una violencia instrumental”.
3.“En consecuencia, los que resisten o se rebelan contra una determinada forma de poder no deberían contentarse con denunciar la violencia o criticar la institución. No basta con hacer un proceso a la razón en general; es necesario poner en cuestión la forma de racionalidad vigente actualmente en el campo social. La crítica del poder que se ejerce sobre los enfermos mentales o los locos no debería limitarse a las instituciones psiquiátricas; (la negrilla es nuestra) del mismo modo que aquellos que se oponen al poder de castigar no deberían contentarse con denunciar las prisiones en tanto que instituciones totales. La cuestión consiste en conocer cómo están racionalizadas las relaciones de poder. Plantearse esta cuestión es la única forma de evitar que otras instituciones, con los mismos objetivos y los mismos efectos, ocupen su lugar”.
4.“Desde hace siglos el Estado ha sido una de las formas de gobierno humano de las más extraordinarias y también de las más temibles”( M. Foucault “La vida de los hombres infames”, E. Altamira, p. 203)
El estado desde sus inicios ha cumplido una doble función: a la vez que individualiza (crea al ciudadano con derechos), también cumple una función totalitaria (es él quien otorga o niega el derecho a sus ciudadanos). De ahí que, “…Oponer al estado por tanto el individuo y sus intereses es tan aventurado como oponerlo a la comunidad y sus exigencias”. Lo que nos dice en últimas es que, para producir un cambio en las políticas del estado que favorezcan a un colectivo como las personas con discapacidad, es fundamental “ir las raíces mismas de la racionalidad política”. (La racionalidad política de los Estados occidentales modernos se ha basado en el contrato social utilitarista, que en síntesis plantea que el contrato es posible entre hombres que cumplan los atributos de ser: libres, iguales e independientes en el pleno uso de su capacidad de razonamiento).
Las leyes son la expresión de ese poder convertido en códigos. No hay una sola Ley (real, verdadera, que se cumpla) que no sea el producto de una confrontación de fuerzas. Las guerras han sido la expresión más cruda de esta realidad. Fue Karl Von Klausewitz, (estratega y militar de los ejércitos prusianos) en su texto “De la guerra” quien, analizando las guerras napoleónicas dijo: la guerra es la continuación de la política por otros medios: Esta afirmación fue aceptada durante casi doscientos años y, para algunos aún los sigue siendo. Para M. Foucault, es todo lo contrario: la política es la continuación de la guerra por otros medios. Es decir, siempre estamos en guerra. El hecho de no ver armas y hombres enfrentados en batallas, no significa que estemos viviendo en paz. El poder obtenido en una batalla estará siempre en riesgo de ser arrebatado por el adversario, puesto que se está permanentemente en guerra. La guerra comercial es la disputa por territorios (mercados) esta bien representada en la teoría y práctica de la administración de negocios. La violencia de las armas bélicas, es sustituida por la violencia de la propaganda, el precio y el producto. El lenguaje que usamos a diario está cargado de significantes y significados violentos (de guerra) más de lo que pensamos: “Que rumba tan violenta!, “esta violenta esa camisa”, etc. En la terminología médica podemos mencionar algunas: atacar la enfermedad con…, cáncer invasivo, mejorar la marcha, entre otras.
En el terreno de las ciencias, el discurso científico es el resultado del enfrentamiento de fuerzas (ideas, conocimiento y practicas) opuestas. Estos discursos se crean y re-crean en contextos económicos, políticos y sociales concretos, justificando la fuerza vencedora. El término discurso, en M. Foucault, “no es solo un sinónimo de habla, sino una practica material históricamente situada que produce relaciones de poder”. (Foucault y la teoría queer”, Spargo, Tamsin, Gedisa Editorial, 2004, pp 85). Por lo tanto los discursos promovidos y alentados, son los provenientes del bando ganador, de esta manera imponen su manera de ser y estar en el mundo. A lo que hemos llamado una ideología dominante de la normalidad.
A partir del surgimiento de la filosofía racionalista en los siglos XV y XVI, los saberes y las practicas de las diferentes disciplinas avaladas por la ciencia, han contado con la fuerza suficiente para constituirse en poder. Su fuerza ha consistido, entre otros, en ser capaces de crear clasificaciones patológicas (basadas en el criterio de enfermedad) que se constituyen en categorías sociales mediante juicios de valor, donde a cada categoría le corresponde por oposición, una categoría contraria: superior/inferior, normal/anormal, sano/insano, cuerdo/loco, etc. Este modelo de clasificación “científica” se produce y reproduce en todos los ámbitos de la vida justificando (naturalizando) la desigualdad social. Clasificación y categorización que corresponde a ciertos atributos: condición económica, lugar de origen (nacionalidad), credo religioso, raza o etnia, sexo, elección sexual (gay, lesbianas, transexuales), edad (niño o viejo)y tantas otras.
La clasificación y categorización por la condición física y/o mental. “inferiores” o “desviados”, inferiores por su incompletud (¿Esta palabra?) o deficiencia corporal y desviados, en sus comportamientos mentales o sexuales. Así, la psiquiatría crea al loco, la psicología crea al homosexual, el derecho al criminal, la medicina al invalido (discapacitado). Todos sobre una base científica (biología evolucionista: darwinismo) pero con un trasfondo ideológico de “normalidad”. El darwinismo “descubrió” (es una postura ideológica del momento) que las seres vivos en cada especie evolucionan permanentemente y al mismo ritmo (¿Al mismo ritmo?), por lo tanto, los ejemplares que resultan con características de deformidad o incompletad (¿Esta palabra es correcta?), son seres no evolucionados totalmente, retrasados en su evolución. En tales condiciones, sobrevivirán los más fuertes y morirán los débiles. En términos estadísticos, se salen de la “frecuencia”, de la normal. Estos “descubrimientos” dieron origen a la teoría eugenésica de R. Galton (primo de Ch. Darwin) que a su vez fue la base “científica” de la política de “limpieza étnica”, del exterminio fascista de Adolfo Hitler durante la segunda guerra mundial. Pero no solo de los judíos, también de polacos, gitanos, incluso de los mismos alemanes.
La teoría evolucionista de Ch. Darwin y sus posteriores desarrollos como la manipulación genética, es la base de la eugenesia de hoy. Lo que pretende la ciencia (ésta ciencia al servicio de los intereses económicos y políticos de la élite dominante) es la homogeneización de la sociedad. Usar el conocimiento científico para estandarizar la población bajo los parámetros por ellos definidos. Ejemplo, un único modo de pensar (que el mundo es como es y no hay forma de cambiarlo), un único cuerpo, el cuerpo mercantilizado. Un cuerpo idealizado y proyectado en la mitología con los dioses griegos y romanos. Al no existir estos cuerpos, los artistas de la antigüedad en Grecia los representaron en Afrodita y los romanos en Venus. No son cuerpos humanos, pero el actual mercado de la salud y la belleza los han tomado como el modelo a seguir. Son cuerpos : atléticos, esbeltos, lozanos, “perfectos” que los vemos en las pasarelas y en las Olimpiadas, son esos cuerpos a los que exaltamos y rendimos culto, tal cual, como en la Grecia y Roma de la antiguedad. El objetivo del capitalismo ha sido desde su nacimiento llegar a una sociedad homogeneizada. Una sola manera de concebir el mundo, de ser y estar en mundo (en la política, la sociedad, en todo), donde las diferencias son reconocidas en lo formal, más no en lo real. La presunción de igualdad es tan solo jurídica.
Resulta interesante aquí mencionar, así sea brevemente, como la ciencia médica y jurídica contribuyeron decididamente en la construcción del concepto de “anormales”, en contraposición al de “normales”. M. Foucault retoma de Erving Goffman, (“Estigma: la identidad deteriorada”) el concepto de estigma al investigar sobre los dispositivos de control en las sociedades de los siglos XVII y XVIII en Europa central. Los desarrollos de la medicina con las técnicas de observación sistematizada de los enfermos en los hospitales (es de recordar que, solo hasta entonces los asilos eran lugares de confinamiento donde el enfermo no esperaba una cura para su mal, simplemente, esperaba le llegara la muerte. Le acompañaban religiosas de la caridad con el objeto de salvar su alma de las garras d lucifer y entregarlo a los brazos de Dios). La visita del médico era solo de registro, de ir elaborando en el día a día, una historia clínica. Así nació la clínica: de observar, estudiar, analizar “la vida sin la vida”, es decir, la anatomía y fisiología humana, desprendida de toda consideración de persona, pues para los médicos de entonces no importaba lo que el paciente quisiera para su mal. El ser humano, la persona humana, pierde su condición de sujeto (desubjetivización), para convertirse en objeto de la ciencia. Es así como la ciencia con su saber, su voz de verdad única, se erige como un saber-poder hegemónico.
Por aquellos tiempos de la Ilustración (entre el Renacimiento y la Era moderna), los descubrimientos de Charles Darwin se convierten el paradigma de las ciencias, no solamente para la biología, la medicina y las ciencias exactas, sino también para las ciencias sociales. Se asumió que el comportamiento humano seguía las mismas reglas descubiertas por la biología en las especies de animales no racionales y, en general de las ciencias naturales.
La estadística como ciencia matemática aportó conceptos y fundamentos como: la “normal”, “desviaciones”, todo dato que no se ajuste a la norma, que está fuera de ella, es una anormalidad a corregir, es decir, es llevarla o (al menos) aproximarla a la “normal” estadística. De tal suerte que, a partir de entonces, la medicina y la siquiatría se encargan de “normalizar” los cuerpos anatómicamente anormales y las mentes desquiciadas.
Pero hay algo más que decir de las matemáticas. El concepto de diferencia empleado en el campo de la discapacidad, cuando queremos hacer notar que las PCD tenemos características distintas a otras personas y que, por lo tanto, no se trata de que seamos física o mentalmente incompletos o deficientes, la diferencia es entendida como el resultado de la operación matemática de sustracción. Es decir, en la operación matemática de restar del minuendo (numero mayor, completo) el sustraendo (número menor, incompleto), lo que queda es la diferencia. La diferencia matemática es lo que le falta al minuendo para ser igual al sustraendo, en la semiótica de la discapacidad, es lo que le falta a las PCD para ser igual a los “normales”.
Estas sutilezas del lenguaje pasan desapercibidas en las relaciones entre los seres humanos, pero no por eso, dejan de tener unas implicaciones profundas de estigmatización de una población así diferenciada.
El saber-poder del profesional de la salud, del derecho, etc., acreditado por las instituciones de formación “científica”, se impone sobre la “ignorancia” de la PCD. El poder de normalización aplasta, oprime, se impone violentamente (sin ninguna alternativa) en el cuerpo incompleto, deforme, maltrecho, infuncional, antiestético, aterrador y monstruoso del Otro discapacitado. Estos saberes se han erigido en los árbitros de nuestras vidas. Crearon una categoría de inferioridad para nosotros, pero no contentos, allí dentro, crearon subcategorías para hacernos más diversos (diferentes) dentro de lo diverso (diferente). Para que tu discapacidad no se parezca a la mía, sus discursos y practicas nos escindieron, nos fraccionaron, nos partieron, nos rompieron. La discapacidad así subdividida no es un sola, son múltiples discapacidades: los ciegos, los sordos, los parapléjicos, etc. cada subcategoría viviendo sus “infortunio” arrinconada y en silencio. Se entiende con claridad las dificultades que crea el estar escindidos cuando de hablar el mismo lenguaje se trata, cuando de plantear soluciones se trata. Pero hay que insistir, es un escisión artificiosa de la ciencia, puesto que la discapacidad son las barreras que la sociedad, el medio nos coloca a las personas que no funcionamos igual a la mayoría, es decir, el problema es social y no médico, por lo tanto, la solución está en modificar la sociedad, en modificar el medio en que vivimos las PCD.
Volvamos al inicio: el poder. Preguntarán algunos: Qué tiene que ver el poder con la discapacidad? Acaso las PCD nos queremos tomar el poder? O porque tengamos poder, dejamos de ser PCD? Pues bien, a estas preguntas podemos responder con las siguientes contra preguntas: será que las PCD acceden igualmente de fácil que los no discapacitados a los puestos de trabajo? Será que (generalizando) las PCD reciben, de los no discapacitados, igual trato de sus familiares en sus casas, en el vecindario, la escuela, el trabajo, en el espacio público, en los centros comerciales? Será que el espacio publico, el acceso a la información es diseñado y construido para el uso y disfrute de todos y todas sin distingos de condiciones físicas y/o mentales? Si esto no es así, entonces ¿como se explican estas diferencias negativas (diferencia matemática, de resta, sustracción) con las PCD?
La explicación es la racionalidad económica: diseñar y construir para el uso y disfrute de todos y todas sin distingos de capacidad funcional por “deficiencia” física o mental, resulta demasiado costoso. Cosa que no ocurre cuando se trata de colocar en igualdad de condiciones (no discriminación) a otros colectivos como los indígenas, afros, lagtb, etc., puesto que estos no requieren adaptaciones técnicas, edilicias, urbanísticas, de transporte, etc. Los argumentos de exclusión por ser minoría con necesidades especiales cuenta con un basamento legal pero injusto: 1) la democracia, como sistema de gobierno de las mayorías (no discapacitadas), al cual se deben someter las minorías (discapacitadas). 2) el contrato social vigente basado en los supuestos de intercambio y beneficio mutuo entre ciudadanos libre, iguales e independientes en el uso pleno de la razón.
Esto conduce a mantener una sociedad fragmentada en clases sociales. Habrá ciudadanos de primera y de segunda categoría: a los que se les reconocen los derechos plenos y a quienes se les reconocen los derechos restringidos. Una clase hegemónica, dominante, eurocentrista, poseedora en abundancia de bienes materiales y simbólicos, blanca, homofóbica, heterosexual, letrada, biológica y mentalmente “normal”, pero sobre todo, altamente excluyente. Y otra que no es nada de eso.
Una aclaración necesaria:
Debimos emplear aquí el termino “disk” en contraposición al de PCD o Persona con Discapacidad. La expresión Persona con discapacidad es una designación por encargo(imposición que hacen otros para nombrarme) desde la Organización Mundial de la Salud OMS y no una construcción propia del colectivo designado así. Es interesante analizar como la condición “Queer” (del inglés “raro”) fue adoptada por el movimiento reivindicativo de la libre elección sexual. Los queer se niegan a aceptar todo término que los designe homosexuales o lesbianas, simplemente son “queer”, O los negros con su elaboración conceptual de afrodescendientes). Es el principio para ir marcando una identidad disk y negarnos a la designación de PCD.

TEMA OPROBLEMA?
Una última observación. Para la ciencia (medicina, derecho, psicología, pedagogía, etc.) la discapacidad es UN TEMA dentro miles de temas de investigación, de aplicación del método científico (observación, registro, seguimiento y verificación). Para la persona con discapacidad es EL PROBLEMA (no digo SU…, pues bien sabemos que un problema involucra múltiples actores, la persona con discapacidad es solo uno de tantos). Esta aclaración es necesaria puesto que, es bastante común encontrar en el medio académico y en las entidades de gobierno, docentes y funcionarios públicos hablando del TEMA de discapacidad. Cuando los “expertos“ hablan de TEMA, el Otro discapacitado es solo parte del tema. La solución le viene dada en términos abstractos por personas ajenas (expertos) que no consultan los deseos, ni toman en cuenta las decisiones del “paciente”. Esto deja ver claramente como se construye al Otro discapacitado. TEMAtizar la discapacidad y no PROBLEMAtizar es el resultado de un ejercicio de PODER de TODAS las instituciones, tanto publicas como privadas. Poder maliciosamente usurpado mediante el uso del lenguaje a las PCD y sus familias. Recurriendo al Diccionario de Etimología de la Lengua Española, tenemos: Tema: asunto o materia de que se trata. Del griego théma: tema, asunto, proposición, algo puesto o colocado. Problema: Cuestión de solución dudosa…. Del griego probállein- presentar, exponer, lanzar hacia delante. De pro- hacia delante; bállein-echar, lanzar. Bien dice C. Skliar: “…el otro se transforma en un tema, siempre es un tema: así, por ejemplo, no hay niños y niñas, hay “infancia”; no hay sordos, sino, “sordera”; no hay pobres, sino “pobreza”, “indigencia”, “clases populares”, “clases bajas”, etc… Además, así podremos, siempre, sin obstáculos, sin remordimiento (también sin amorosidad), “festejar el día del indio, el día de la mujer, la semana de la deficiencia”. (REVISTA COLOMBIANA DE EDUCACIÓN, No. 50 2006 p.p. 253-267 UNIVERSIDAD PEDAGOGICA NACIONAL, REFLEXIONES: FRAGMENTOS DE AMOROSIDAD Y DE ALTERIDAD EN EDUCACION).
BIBLIOGRAFÍA:
Breve Diccionario Etimológico de la Lengua Española, Gómez de Silva, Guido. Editorial Fondo de Cultura Económico. 2006
Buscando mi madredediós, Palacios, Arnoldo. Editado Universidad del Valle/Ministerio de Cultura. 2009
La vida de los hombres infames, Foucault, Michel, Editorial Altamira, 1996
Revista Colombiana de Educación, No. 50 2006, REFLEXIONES: FRAGMENTOS DE AMOROSIDAD Y DE ALTERIDAD EN EDUCACION, Universidad Pedagógica Nacional.
Foucault y la teoría queer, Spargo, Tamsin, Gedisa Editorial, 2004

jueves, 10 de septiembre de 2009

LOS RIESGOS DE QUEDARSE EN EL CONCEPTO JURÍDICO DE LA CONVENCIÓN

La Organización Mundial de la Salud (OMS) define los términos de Discapacidad, Deficiencia y Minusvalía en los años ochentas. Con pequeñas modificaciones hoy, son la base conceptual de la Convención Internacional aprobada en marzo de 2007 por la comunidad internacional concurrente en la Organización de Naciones Unidas (ONU).

Deficiencia, es lo que no funciona o falta en el cuerpo o la mente de cada ser humano.

Discapacidad, son las barreras, los obstáculos que encuentran las personas en el medio donde se desenvuelven.

Minusvalía, es la desventaja de la persona con deficiencias. De tal modo que es más minusválido el que tenga más deficiencias o a quien el medio le coloque más barreras.

Ahora veamos. Los términos adoptados por este organismo (OMS), para designar a las personas que hacemos y/o tenemos una forma diferente a la mayoría de ser o estar en la vida, se nos llama: "Personas con discapacidad". Esa expresión es acepta en el mundo, pues proviene de un acuerdo de expertos del saber médico.

Aquí se asume que la discapacidad la posee, le pertenece a la persona, casi que es connatural a ella, como si la sociedad que pone las barreras, los obstáculos no tuviera nada que ver, es decir, ninguna responsabilidad; en últimas la "culpa" de estar discapacitado (a) es de quien no funciona en el medio que le correspondió vivir. Tal vez (¿?) seremos “personas con deficiencias” y discapacitadas por la sociedad, que es muy distinto a ser "personas con discapacidad", pues ninguno de nosotros (as) ha querido estar discapacitado por voluntad propia. Pero la discusión que queremos plantear va un poco mas allá.

Cuando se dice que somos personas con deficiencias o que nos falta algo en el cuerpo o la mente, es admitir que el cuerpo completo y sin deficiencias (OMS), es el cuerpo perfecto, el ideal, lo que llamamos en nuestro medio "normal". Quienes no nos ajustamos al patrón de "normal" estamos trasgrediendo la norma de la naturaleza, no nos ajustamos al patrón establecido por la ciencia médica (medidas antropométricas normales, coeficiente intelectual normal, fisiología normal, visión 20/20, etc.) , por lo tanto, es necesario hacer ajustes de normalización, para llevarnos al camino co-rrecto de la estandarización, esto se hace a través de las distintas técnicas de rehabilitación, pero de manera mucho más sutil y refinada mediante la eugenesia, como por ejemplo: biogenética, la esterilización, la eutanasia. En últimas, se nos reconoce como cuerpos diferentes, diversos, pero no se nos acepta. La etimología de claridad sobre estas dos palabras. RECONOCER: Darse cuenta de que algo que se percibe había sido percibido antes; del latín cognoscere, conocer de nuevo. ACEPTAR: Recibir voluntariamente o con gusto; del latín accepare, frecuentativo de acciperé, recibir

Consideramos necesario estas aclaraciones previas para que analicemos el instrumento jurídico de la Convención Internacional de los Derechos de las Personas con Discapacidad” que no pasa de ser un manual de “buenas intenciones”; útil para una sociedad que acepta lo arbitrario como norma, lo desigual. A la formulación de las leyes se puede llegar mediante acuerdos o imposiciones. El gobierno de las naciones de regímenes democráticos en occidente se rigen por tres órganos: Legislativo, Ejecutivo y Judicial. Las leyes son promulgadas por el Legislativo (el Congreso, ciudadanos elegidos mediante voto popular). Este poder del estado, que en las nacientes repúblicas de la Europa del siglo XVIII pretendió darle igualdad de derechos a los ciudadanos mediante un gran acuerdo que en las clase de historia nos lo han enseñado como Contrato Social, ha sido absorbido progresivamente por actores organizados de la sociedad, organizaciones que se disputan el control sobre las personas y las poblaciones. Esos actores son los diferentes sectores de la economía (financiero, industrial, comercial, agrícola y ganadero, minero), los medios masivos de comunicación, las empresas de tecnología avanzada, actores con poder económico, pero sobre todo con poder político para tomar decisiones por “encima” del estado. Un ejemplo de esto son los cambios de comportamiento de las personas (sensación de inseguridad, necesidad de control sobre nuestros hijos, por ejemplo) que las nuevas tecnologías como el internet o el teléfono celular han producido. De esta manera la capacidad de gobernar una nación mediante las leyes aprobadas por el Legislativo, queda en manos de otros actores otras fuerzas de poder.

El compendio de normas o leyes que se establecieron en un principio a partir del Contrato Social, está siendo suplantado por una norma que privilegia la dinámica de oferta y demanda, ley del mercado. Resulta interesante traer las reflexiones de M. Foucault con respecto a sus estudios sobre la relación del poder – sexo en los finales de la edad media, pero que son los mismos que hoy nos permiten analizar la relación poder – discapacidad. M. Foucault: “A partir de la Edad Media, en las sociedades occidentales el ejercicio del poder se formula siempre en el derecho…Hace ya siglos que entramos en un tipo de sociedad donde lo jurídico puede cada vez menos codificar (convertirlo en códigos o leyes) o servirle de sistema de representación. Esta inflexión (quiebre) nos aleja cada vez mas de un reino del derecho que comenzaba ya a retroceder en el pasado, en la época en que la Revolución Francesa, cuando la edad de las constituciones y los códigos, parecía convertirlo en una promesa para un futuro cercano”. Tiempos aquellos y estos en que “…el derecho debe ser la forma misma del poder y el poder debe ejercerse con arreglo al derecho”. Es el mismo M. Foucault quien propone una salida al enfrascamiento en que se encontraban los análisis de las relaciones poder y los comportamientos de la gente, entre ellos el sexo. No se trataba de establecer prohibiciones (leyes) de ciertos comportamientos humanos mediante códigos, de lo que se trataba era de entender como son las relaciones entre los distintos miembros de la sociedad, que para M. F., las relaciones entre las personas son relaciones de poder en todos los ámbitos de la vida, tanto pública como privada, relaciones dinámicas y en permanente movimiento o cambio donde resultan dominadores y dominados.

El Diccionario Etimológico de la Lengua Española dice que Poder es tener la capacidad o los recursos para; tener permiso de; capacidad, fuerza, dominio. Si el poder es una Capacidad, tal como lo muestra el diccionario, nos preguntamos ¿qué implicaciones tiene designar a Otro como discapacitado? ¿El discapacitado físico no termina siendo un discapacitado político? Por eso, terminamos diciendo con M. F: “Hay que construir una analítica del poder que ya no tome al derecho como modelo y como código”


COLECTIVO DISCAPACIDAD UNIVALLE
EL COLECTIVO DE PERSONAS CON DISCAPACIDAD* DE LA UNIVERSIDAD DEL VALLE TE DA LA BIENVENIDA


Apreciado estudiante, recibe un cordial saludo de bienvenida a la Universidad del Valle. Por tus propios medios has ingresado a una institución con más 60 años de historia donde, seguramente se han formado personas cercanas a ti, y es el deseo de la Universidad que tú también recibas una formación integral independientemente de la carrera que hayas elegido. Esperamos tu vinculación plena a la vida universitaria, haciendo uso de los espacios físicos y de participación que te brinda la Universidad. Estudiar en la Universidad es un tránsito enriquecedor en la medida que participes activamente de la “vida universitaria”.


La riqueza de estar en la U, es que puedas compartir tus experiencias con personas que piensan igual o diferente que tú. Universidad proviene de universal. Ella tiene ese privilegio de ser universal en los saberes, de otro modo, no nos diferenciaríamos de un politécnico o de una escuela de artes y oficios. En este sentido, rescatemos las palabras de E. Morín, “…cuando define la tarea extensa de la Universidad como “defender, ilustrar y promover en el mundo social y político, valores intrínsecos de la cultura universitaria: la autonomía de conciencia, la problematización (con la consecuencia de que la investigación debe seguir siendo abierta y plural), el primado de la verdad sobre la utilidad, la ética del conocimiento”1.

Históricamente las personas con algún tipo de deficiencia física, mental o sensorial (en nuestro medio se considera que alguien que hace las labores cotidianas (comunicarse, desplazarse, etc.) de manera diferente a como lo realiza la mayoría, es deficiente) tenemos más dificultades de acceso puesto que el medio no está pensado, ni diseñado para todos y todas. Personas con discapacidad, desde siempre hemos existido en todas partes, y nos las “arregladmos” de una u otra forma. En la medida en que la humanidad avanza cultural, política y económicamente (“desarrollo”), los más débiles se quedan (o nos quedamos) rezagados, excluidos. En la educación superior, las probabilidades de quedarse rezagado (a) son mayores, puesto que la velocidad a la que se produce el conocimiento, los cambios en los modos de producción, en las innovaciones científicas y tecnológicas, son vertiginosas; hasta los años 60s, lo que demoraba diez años en cambiar, hoy cambia en solo un año. Esto es valido para todos y todas, pero es de reconocer que, para las personas con discapacidad el riesgo se aumenta considerablemente. A este respecto rescatamos las palabras del Dr. Delfín I. Gruesso, cuando se refiere al compromiso que debe asumir la Universidad pública con aquellos sectores de la población históricamente excluidos: “Esto (la exclusión) le impone a la Universidad una nueva tarea, esta vez en el plano simbólico y educativo, a favor de aquellos sectores, colectividades y culturas que han sufrido un ancestral daño por parte de la cultura hegemónica, que no han sido reconocidos y no han podido articular una identidad con la cual presentarse en el terreno de lo público”. 2

La Universidad del Valle ha realizado esfuerzos importantes en facilitar tecnología, subsidios y adecuaciones edilicias para aminorar las desventajas en qué quedamos algunos estudiantes, profesores y trabajadores con discapacidad, sin embargo son insuficientes y es necesario que estos esfuerzos sean mayores, ya que la población universitaria va en aumento y la población con discapacidades es más diversa, es decir, sus necesidades más particulares.


Es por todo esto, que en el año 2003 Sintraunicol (Sindicato de trabajadores y empleados de la Universidad del Valle), aportando un grano de arena, negociara con la Dirección Universitaria la creación de “un Comité que se encargará de adelantar un estudio que “determine para la institución las necesidades de atención a los discapacitados en términos de promoción y prevención”. Nace así el “Comité de Atención a los Discapacitados de la Universidad del Valle”, mediante la Resolución de Rectoría No. 086 del enero 27 de 2003. La Universidad se comprometió a desarrollar acciones de equiparación para empleados y trabajadores, dependiendo de la disponibilidad de los recursos económicos. Estuvimos de acuerdo en el Comité de Atención a los Discapacitados de la Universidad del Valle en que las obras y equipos que se requerían no eran solo para el gremio de los trabajadores, por lo tanto, planteamos desde Sintraunicol, que se trataba de iniciar el diseño de Políticas Institucionales de Atención a la población con discapacidades; el Comité, estuvo unánimemente de acuerdo. Era tal la precariedad de información que no había una estadística, entonces convinimos en la realización de un censo; luego, vino la creación del Grupo Gestor con el cual se trabajó la formulación de propuestas para la Política Institucional que finaliza con la presentación a la Rectoría de un documento con dieciocho (18) puntos. Este documento de propuesta contiene puntos muy importantes, como son:

1. Inclusión y reconocimiento de las personas con diversidad funcional (“discapacitados”) como parte activa en la formulación de los planes institucionales, incluyendo indicadores que den cuenta de las condiciones de su calidad de vida.

2. Impulsar en todos los programas académicos de la Universidad el abordaje a temas relacionados con la diversidad humana. (Transversalidad curricular).
3. Gestionar ante la Vicerrectoría Académica la aprobación de dicha asignatura, acompañados por la Escuela de Rehabilitación Humana.

4. Adoptar medidas positivas para el ingreso a la Universidad de la población con discapacidad. (Nota: Negritudes e indígenas tiene el 4% de los cupos cada uno, desmovilizados, 2%)

5. Implementar tecnologías de comunicación universalmente accesibles.

6. Solicitar a la Universidad que en la formación del cuerpo docente se tengan los recursos tecnológicos y pedagógicos necesarios para trabajar con personas con discapacidad.

7. Construcción de una base de datos estadísticos de las personas con discapacidad que posibilite la planificación de la Política Institucional.
8. Dar a conocer los derechos de los y las estudiantes regulares con discapacidad matriculados en la Universidad.

9. Apoyar la inserción laboral y la capacidad emprendedora de los futuros profesionales.

10. Realizar las adecuaciones necesarias en las dimensiones de deambulación, aprehensión, localización y comunicación.

11. Coordinar con la Oficina de Planeación la continuidad y seguimiento de los planes de desarrollo.

12. Convocar a la participación de este proceso a las personas con discapacidad de las sedes regionales y a los y las estudiantes desescolarizados.

13. Fortalecer la investigación, vinculación y comunicación con el entorno social, político y económico en asuntos de discapacidad.

Estos puntos fueron producto de largas discusiones y concertación final que el Grupo Gestor presentara ante el Rector, hace aproximadamente dos años. Igualmente el Colectivo ha estado todos los años, desde su creación, y en fecha distintas realizando actividades recreativas, académicas y de participación e integración con la comunidad.


Consientes de que el trabajo del Colectivo debe ir más allá de reivindicaciones coyunturales, hoy nos planteamos el trabajar en dos ámbitos: uno, es gestionar ante la Dirección Universitaria las condiciones de accesibilidad (salones, subsidios, desplazamiento) de los compañeros y compañeras con discapacidad en el campus universitario y; dos, en la vía de construir pensamiento crítico alrededor de esta cuestión, esto es, debatir o poner en cuestión los diferentes modos de pensamiento que han circundado la construcción del Otro deficiente. En conclusión: hacer pensando.


Esta es la invitación compañeros y compañeras Univallunos con y sin discapacidad, este Colectivo no hace diferencias de ninguna índole, inclusivo cien por ciento, respetuoso de las creencias y ritos, abierto a todas las formas de pensamiento, deseoso de hacer de Univalle un espacio académico, investigativo, cultural, recreativo, de discusión, de compromiso ciudadano donde quepamos todos y todas.
* Los conceptos mundialmente aceptados para referir a las personas corporal o mentalmente diferentes a los patrones establecidos como “normales”, son una construcción de la comunidad médica legitimada en la Organización Mundial de la Salud (OMS), organismo adscrito a la Organización de Naciones Unidas (ONU). Conceptos que han sido cuestionados desde sus inicios por la comunidad mundial afectada, particularmente por los “Disabilities Studies” en el Reino Unido y los Estados Unidos.
1 Cátedra abierta Estanislao Zuleta: Pensar colectivamente la Universidad, Pérez, 2008, pp. 84
2 ibídem, pp. 89